Quequé: “Lo que más me ha ayudado a llegar aquí ha sido mi jeta”

Un lleno absoluto en Clan Cabaret fue lo que el humorista Quequé, que estuvo fenomenal,  consiguió el pasado sábado 11 de madrugada. Fueron muchos los momentos  que disfrutamos durante su espectáculo titulado Antolojeta.Y por si fuera poco Quequé estuvo acompañado del guitarrista Raúl Martín que se encargo de ponerle sonido a todas las canciones que nos cantó a lo largo de todo el espectáculo. Descubrimos también que él  es de los que va con el coyote y no con el correcaminos. Pero si te lo has perdido, todo esto y mucho más puedes disfrutarlo en sus shows de la gira Antolojeta así que busca el más cercano a tu ciudad y compra tu entrada.
Tras su espectáculo Quequé nos concedió una entrevista.
¿Por qué has decidido llamarle Antolojeta  a tu show humorístico?
Pues porque lo que más me ha ayudado a llegar aquí ha sido mi jeta, jeta entendida no como cara sino como morro.
¿Siempre has querido dedicarte al humor?
Bueno, tuve mis devaneos con el mundo cantautoril y ahora ya me tomo la venganza en el espectáculo pero si tuve la inquietud de ser músico y tener un grupo.
¿En qué te inspiras a la hora de crear tus monólogos?
Noventa porciento mi vida, luego ya la exagero de tal forma que la gente que sale en la anécdota no se dé cuenta, para que no me denuncie, no se enfade, pero normalmente los cómicos es lo que oímos por la calle.
¿Y alguna vez has hecho o dicho algo en el escenario de lo que luego te hayas arrepentido?
Muchísimas veces, prácticamente todas las noches, lo que pasa que bueno también el espectáculo lleva una parte de improvisación que a veces sale a veces no y a veces dices cosas que te vienes arriba y luego no funcionan; sonaban mejor en tu cabeza, que es la frase que se dice, pero bueno esto es así, hay veces que aciertas y hay veces que no.
¿Te gusta más actuar en teatros grandes con más público o en salas dónde puedes interactuar con la gente?
Yo creo que el encanto que tiene este tipo de salas es muy difícil de llevar a un teatro, el teatro mola pero está la gente en otra actitud, está como seriota, en su butaca, el teatro ya impone y aquí en una sala como esta la gente está con copas, antes se fumaba y estaban fumando y es otro rollo. El espectáculo es totalmente distinto en un teatro aunque sea el mismo espectáculo es otro rollo.
Has sido guionista, presentador, ahora trabajas también en radio, ¿con cuál de estas facetas te quedas si tuvieras que escoger?
Si tuviera que escoger seguramente me quedaría con la radio, afortunadamente no tengo que escoger, pero la radio siempre tiene algo especial, no sé qué es ni sé definir, pero la radio es maravillosa; es donde menos me pagan y donde mejor me lo paso.
¿Y de los programas que has hecho en televisión cuál te ha gustado más hacer?
Yo le tengo mucho cariño por lo que supuso en la época Noche Hache pero yo me quedaría con Splunge. Sería muy difícil juntar ese reparto ahora, Eva Hache, Patricia Conde, Miki, Flo, Agustín Jiménez; y nos lo pasamos de vicio, fueron dos meses de hacer el gamberro por todos los lados.
¿Tendrías ganas de volver hacerlo o volver a la televisión?
Sí, Splunge me encantaría volver hacerlo. Otro tipo de programas como el de Noche Hache me da un poco más de pereza porque ya  es lo mismo de siempre salir ahí leer una cosa pero un programa de sketches que ahora haces de fontanero y luego haces de mecánico, mola.
Cambiando de tema, ¿Eres adicto a twitter?
Totalmente, yonki del twitter.
¿Y cómo fue eso de hacerte una cuenta?
Pues yo era de los de “no a mi las redes no, yo eso no, eso no” y un día me hice twitter, tardé un año en cogerle el punto porque la verdad es que no entendía para que servía un poco eso y de repente estábamos ahí con 80.000 seguidores y la verdad es que me lo paso muy bien porque twitter también permite mucho hacer un tipo de humor que en la tele o en la radio es muy difícil de hacer, el humor negro, el humor más bestia.
¿Y crees que a lo mejor puede llegar a perjudicar a alguien según lo que se escriba?
En mi caso como soy cómico es difícil, al fin y al cabo los cómicos tenemos un poco bula para decir lo que queramos pero claro si eres Alejandro Sanz o David Bisbal y pones no sé que  de Egipto pues sí, te puede perjudicar. Twitter lo que tiene es que como todo en  internet  elimina intermediarios entonces de repente conoces a Alejandro Sanz como es, con su iPad twiteando mientras está en el váter y eso siempre tiene sus riesgos; conocer como es el artista que admiras igual te decepciona.
Para terminar la entrevista, ¿qué consejos darías a los nuevos humoristas?
Pues que se esforzaran un poco en tener personalidad porque al final da igual de lo que hables, todos hablamos de lo mismo, del amor, de la pareja, de los restaurantes chinos y del supermercado; entonces al final lo que diferencia a unos de otros es la forma en lo que tú lo dices y si puedes crearte una personalidad o un personaje mola porque entonces sólo lo puedes decir tú.